PEDIR EN SALMOS
Fruiciones perdidas sobre el suelo
causadas al mirar, como inquilino,
de los respiros criados en tu pecho
y mi sentir mezquino,
que no alcanza,
a prometerse tender en la distancia
un puente robusto y suficiente,
para cargar conmigo y con lo tuyo,
esto que llevo adentro
agradecido,
que no me diste tú,
yo lo tomé,
desde siempre mirado sobre el suelo
la dirección tomada por tu paso,
la forma en que desprendes
ese aroma,
esa mirada última a destajo,
para ver si me fui cuando me voy,
con un canto certero por adiós...
Ambición yo me llamo, te lo juro,
todo lo que he perdido
yendo en busca,
del destino que lleven tus pisadas,
de toda canción cantada por tus labios
que el aire ya hace mucho se llevó,
llevarlas a mi fuera yo deseo,
en caja de cristal hacerles hoy
su lugar convenido,
hermoso albergue,
a tus lágrimas, tu aire, tu sudor,
torpe soy pero sé que de algún modo
en retoños felices formarán
un espacio de honor para mi llanto,
cuando sepa que se marchó la vida
y ese destello amable me quedó
para vivir contigo
siendo de él,
aunque more en mi suelo reducido
como si fuera ese cielo en nuestro ayer...
JOSÉ IGNACIO RESTREPO
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Sublimes son tus letras danzando entre la tristeza y la alegría, pero llenas de nostalgia. Gracias querido poeta por traemos estos bellos versos y que la alegría siempre brille en tu vida, un abrazo.
ResponderEliminarGracias a ti, querida Loly... Feliz semana.
Eliminar....en este escrito casi se siente la fruicion con que deglutes y devoras el alimiento para luego lo lanzares en letras....como si fueras atacado de una bulimia afectiva que engoles en sientimientos y debolbes en la magia de tus letras..
ResponderEliminar....las palabras, à lo revez de la carne, son fugazes, porque hijas de lo tiempo, pero tu las apañas distraídas y las aprisionas en este canto y ellas devoran lo metafisico, enunciado apenas fuermas, estados, colores, olores que restringen lo verbo a lo fisico, anonciando el hambre de los cinco sentidos.....mejor, és imposible, José Ignácio.........!! un beso...
...yo las abrazo, cual si fueran hijas bellas, recién llegadas de viajes solitarios, las tomo con su ígnea franqueza, su utilitaria forma de las manos, y me desboco sobre todas ellas, como bronco caballo que tuviera por solo norma hacerse de su tono, de su destello hermoso, su sapiencia, en cada viaje únicas, sin par, como ese plato de afecto que en la mesa, todos comemos que llamamos pan...Gracias María, puro alimento sos...
EliminarJusto Aldú, admirador de tu obra,me ha tentado a conocerla. Presento excusas por invadir así tu espacio, creo en su palabra y encontrar tus líneas me ha sido de gran agrado compatriota y poeta. Si tu voluntad es que me retire, lo hago, no sin antes reconocer en tu estilo profundidad, unicidad y creativa fluidez de la palabra. Gracias.
ResponderEliminarhttp://jeabelly.jimdo.com/
http://vivencias-jebelly.blogspot.com/
De inicio, eres bienvenida. Segundo, el portal es de pública visita Jeabelly, y mientras haya respetó siempre podrás venir y dejar tus comentarios. Por ultimo, Justo es mi amigo, aprecio su juicio por mi trabajo y también el tuyo. Un abrazo.
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