VENDIMIA
Más de diez, cuento,
pájaros, nubes azules, heliotropos en pleno cortejo,
monaguillos saliendo por la puerta grande, a la lluvia,
libres por fin de tristes homilías,
cuento diez poemas
hijos ilegítimos del gozo,
cuento hasta diez en números romanos
y también los últimos diez sueños
que quedaron dormidos
habitando gaseosas tardes frías
de años dejados al pasado,
y me demoro contando de diez en diez,
flores, grutas, pinos,
rayas amarillas
perfectamente trazadas en la vía,
me tardo pero en últimas
me pierdes antes de seguir al once,
me enardeces, te me vuelves aire,
te conviertes en el frío extranjero de la noche,
y me olvido de contar,
hacia adelante, hacia atrás,
y cuento entonces guiños escondidos,
de tus ojos del color de miel oscura,
esos ojos que profesan
una romántica fe en lo que está vivo,
en lo que puede seguir estando vivo,
cuento los guiños, los aprendo de memoria,
los ato con cordones fantasiosos
que saco de agujero en agujero
de zapatos color de las victorias
que no dejaron gente derrotada
y su huella quedó por todas partes,
y apenas traen la tierra corajuda,
última tierra parda de batalla conseguida…
Y me miro las uñas,
que de la una a la otra se la extraen,,
esa gozosa postrera tierra parda
e inicio una romería con mi cuento,
juntura de golpes de aldabón
contra puertas generosamente abiertas,
en casas habitadas por el viento,
piezas dejadas, rincones que ya nadie puebla,
tierras sin dueño, vientos cansados
que nadie silba con canciones viejas,
y sólo entonces me miro en tus ojos
otra vez,
para olvidar lo poco que hay aquí,
la carga diminuta que me llevo,
mientras despliego al viento mis alas,
pluma por pluma tatuadas con tu nombre…
JOSÉ IGNACIO RESTREPO Copyright ©
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...porque entre guiños y golpes se pierden batallas, a veces, otras se ganan guerras en igual campo, mientras va quedando la piel bellamente dibujada... como alfombra que se extiende previamente al paso...
ResponderEliminarDesdoblados mapas, que nos muestran rutas recorridas, con sus cremalleras puestas allí para abrir y cerrar a voluntad, sabiendo que se ven además algunas intenciones no tan claras, que de difuso modo se hicieron gaseosas ante el mecánico paso de las huestes, que llevaron y blanden aun nuestros nombres de pila...
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