viernes, 4 de noviembre de 2011

RELOJES DE ARENA / Poesía de José Ignacio Restrepo

LATIR PEDIDO


Catamarán silencioso que por la mar recelas,
cada remo seguido de mi fuerza ajena...
porque es ese muelle de tu cuerpo herido
donde mi barco deseoso busca su consuelo,
no te creas que tardo o nado más fecundo
porque te encuentres abiertamente conmovido,
mar océano de nombre augusto y largo
que resuena en mis oídos por viajar en mi alma,
mar que abres tus dos playas gemelas
para que ancle mis serenas artimañas,
o devuelva color a tus dogmas y doctrinas,
que nos hacen unísonos cuando termina todo,
que es precisamente cuando vidas empiezan
lo que sin nombre nace no merece ser adormecido
con oscuras teorías que lo expliquen...
hablabas del amor, silencios dije...
Rondas de cuántas olas cuenten los reclusos
ojos que sin angustia vuelven presos 
de rostros meridionalmente compungidos,
porque tarde entendieron que la vida
se pintaba de sencillos movimientos,
debe el amor más explicarse solo
cuando hecho de mar, de viento,
de soleadas caricias repentinas,
nos habla en todas partes muy sencillo
y de manera elocuente cuando sientes,
que todo en tu carisma convocado
llega justo al centro de lo dado....

JOSÉ IGNACIO RESTREPO 
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2 comentarios:

  1. ES UNA BELLEZA ESTE POEMA!
    GRACIAS POR COMPARTIR!
    UN ABRAZO
    LIDIA-LA ESCRIBA

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  2. Sin tu bellísimo eco de retorno, estaría leve e incompleto...Gracias por tu presencia y lectura querida Lidia...

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