martes, 19 de marzo de 2013

DÍA DE SANTO / Poesía de José Ignacio Restrepo


MENESTER 
DE SOLEDADES


Esta soledad bendita, 
maldita hija del caño al mismo tiempo...
Ahí está en la vega, 
y entre su oscura tez el rojo dogma...
¿Ves? 
aunque es nuestra esclava 
solo viene hasta aquí 
si la gana la llena, 
es la marisma entera, 
la longeva europea, la callada, 
una dama del cielo hecha en la tierra, 
una ramera que solo cobra almas...
Bendigo la tuya,
 su rostro casualmente es similar,
prima hermana de la mía y muerta en vida,
nacidas una vez, gemelas rotas,
cerraduras de la misma poesía,
guerrilleras que luchan 
sin pericia y rencor con ambas manos,
con la piel,  con los ojos ciegos hondos,
sabedoras que tienen ya perdido
lo que de sangre se envare por sentir,
sacratísimas ánforas probadas
y llenas desde siempre 
de palabras...

No probada virtud antes de ahora,
pero envuelta en racimos de esperanza,
tu amada soledad que fue nacida
en preclancias infames y perdidas,
hace hoy de misiva para el verbo,
hermana singular del universo,
que me tiene por súbdito y por hijo,
desde el vientre que fui
en mi madre amada,
fruto soy, árbol soy, terreno soy,
estamento y delgado borde duro,
mientras haga de luz o fuego puro,
me tendrás y seré brillo enjaulado,
detalle de tus ojos, pulimento,
pensamiento que haga de un recuerdo,
uno nuevo de oro y olvidado...


JOSÉ IGNACIO RESTREPO
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4 comentarios:

  1. Bello y complejo poema en que se entrecruzan varias ideas, unas implícitas en el trasfondo y otras más explícitas que parecen implicar un hermanamiento de dos almas.

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    1. Siempre agradecido por tu virtual presencia... Abrazos Fernando...

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    1. Y el casi viento que soy, hoy, dilatado, te prescribe a mi favor aunque enlutado, pueda estar atípico y renuente...Gracias siempre alada Fabiana!!!

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