jueves, 13 de septiembre de 2012

SERVIR... / Poesía de José Ignacio Restrepo

BULAS DE MIEL



El frío de tu flecha antes del bien lanzada, 
contrae las proezas que no tenían voz...
Yelmos, vi, clavicordios, 
esperando tu fuerza
destiñendo proezas cargadas de esperanza
pulsando a tu favor para dotar de ruido,
aunque fuera una sola de tus níveas palabras
y de voces de brío altar de madrugadas, 
y tu enviaste silencios sin ni una voz de hastío,
que esperaban por vos el mapa de tu quehacer...

El vuelto pundonor tiene alas y repta,
dejando entre mil huellas tu secreta constancia,
almibaradas penas rodando en un circuito,
y el alma decantada modulando su encono,
ya me dirás si vuela mi pesar renacido
o es una bruja blanca que apetece tu casa,
y si tus huellas mojan con su seca discordia
el camino del pan que aún no has conseguido...

Entonces ven a verme con tu frente sin llagas,
tu semblanza adiestrada,
tu rostro forajido,
que yo ya tengo aquí al que anteayer me enviaste,
ese bardo sencillo al que duele vivir
y acaso en su sufrir engalana la vida,
pues eligió el camino de contar sus pesares,
enviando de primeras sus bellas alegrías,
sin rostro ni galeno que les cure de nada, 
releídas, amadas, cual duelo de mujer
 amadas poesías bajo sombra de clavel...


JOSÉ IGNACIO RESTREPO
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4 comentarios:

  1. Es un inmenso placer para nuestros sentidos visitar tu morada y deleitarse con la suprema belleza en versos que nos obsequias querido y admirado poeta. Muchos besinos e infinitas gracias por concedernos el privilegio de ser testigos de ellos.

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    1. El placer es mío... En todo caso hacemos de extremos de un mismo huso, y el tejido creado aunque invisible, nos dará calor durante toda la Vida... No dejes de venir, es tu casa...

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  2. Se perfila de nuevo el deseo de un encuentro positivo: Ante la insistencia del amante por encontrar respuestas claras ha encontrado silencios que revelan sólo penas, pero junto al pesar también oculto del mismo amante establecen ambos un circuito común abocado a romper los silencios, ya que ambos tendrán que compartir dolores para formar un círculo creativo, que cambie el signo del primer circuito.

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  3. Me gusta mas contar, que decirme, y escucharte, más que me digas... un abrazo

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