SEGUNDA REGLA
Pero,
hay leyes en la selva de vidrio...
Solemos encontrar sus signos,
y desoír melódicas consignas,
en el favor de alimentar la prisa
y enamorarnos
al calor de los abrazos...
Cementerios de cera
veo llenos
y máculas cubiertas por mortajas,
plañideras ósculos pidiendo,
y derramándose sales
en las casas,
por exigirse ir
a donde no conviene...
Virtud de los placeres insidiosos,
que determinan individuos
sobre grupos,
salvar la vida,
librar a los pasos
de la ruina,
y no obligar más
a discernir
que deberían mirar los ojos...
JOSÉ IGNACIO RESTREPO
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Trampa no siempre posible de percibir desde la obnubilada mente que ama, que se enreda en una propia trampa. Es un vertigo que va del deseo al abatimiento más profundo, cristales que duelen por mortales. Un poema magnífico.
ResponderEliminarCelebro que el sello de tu paso, merced al tema y a su ocaso, me quede aquí, querida Mardy...Espero que te agrade regresar como a mi escribir, para mi es la constante darles mis letras...Agradecido..
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